AHORA MISMO

TANXUGUEIRAS

La revolución del folclore gallego que derriba fronteras

POR TITO LESENDE

Es fácil pronunciar Tanxugueiras: la equis suena como la sh- de Shakira y esa es la clave. El trío gallego está en la cresta de la ola desde su candidatura al festival de Eurovisión, apoyada masivamente por el público en las eliminatorias del Benidorm Fest. No fue suficiente; al certamen europeo irá “SloMo”, defendida por Chanel. Pero las coruñesas ya habían triunfado en su principal objetivo: “Terra”, una muñeira vestida de moderna, había llegado más lejos de lo que nunca hubieran soñado.


Tanxugueiras son Aida Tarrío (Ribeira, 1997) y las gemelas Olaia y Sabela Maneiro (Teo, 1990), así ordenadas de izquierda a derecha en la foto. Se presentan a esta conversación de negro (“pero no nos pusimos de acuerdo”, dicen), estilizadas, con medias de red y las uñas tan largas que podrían arar esa “Terra” a la que cantan. Su popularidad es enorme, especialmente en Galicia. Los coches pitan a su paso. Olaia tira de retranca: “Ahora debemos de estar muy buenas”.


Las hermanas Maneiro tomaron contacto con la tradición musical gallega a los 4 años de edad, cuando ingresaron en la asociación cultural A Mámoa, en la parroquia de Luou (Teo): “Era lo natural en la aldea, el sitio en el que verse”. A unos 60 kilómetros de allí, en Ribeira (en la punta coruñesa de la ría de Arousa), Aida Tarrío empezó a tocar la pandereta con su abuela. Tenía 8 años y poco más tarde entró en Tahúme, referencia de prestigio entre los grupos de baile y música tradicional.


Las futuras Tanxugueiras se curtieron en foliadas y seráns vecinales mucho antes de formar el grupo con el que cantarían en la India, Escocia o Cuba. De niñas aprendieron, de fiesta en fiesta, los resortes de su oficio. “Cuando montamos Tanxugueiras, nunca habíamos cantado con micrófonos ni con monitores”, confiesa Tarrío. “Lo aprendimos todo en apenas cuatro años; fue una evolución muy grande para tres tías que veníamos de la música tradicional. Pensábamos que cogías un disco, lo metías en una maquinita y salía hecho. No éramos conscientes de nada”.

“Había que coger valentía y aprender mucho para llegar a lo que estamos haciendo ahora”

Cuando salió su debut, el autotitulado Tanxugueiras (2018), no tenían ahorros ni un plan de carrera. Pero no tardaron en publicar Contrapunto (2019), un paso adelante en repertorio y producción. Y su propuesta comenzó a recoger aplausos fuera de España e incluso de Europa. “Alguna gente asocia a Galicia con el estereotipo celta, la gaita y la manera de tocar en Escocia o Irlanda”, explican, “y esa parte existe. Pero las cantareiras no tenemos nada que ver. La percusión y las voces cantadas vienen más de la península y de África. Incluso de Europa del Este. Nosotras tocamos con Shooglenifty, un grupo escocés, y con indios de Rajastán. Y esto último nos resultó más fácil”.


En 2021, Tanxugueiras decidió llevar su fusión un poco más lejos. Con temas como “Midas” o “Figa”, el trío propulsó su folclore con el sonido del pop urbano actual. Entonces llegó el reclamo de los eurofans y la insólita propuesta de presentarse al festival de Eurovisión. Y el abrazo masivo del público. Dice Olaia Maneiro: “Nuestro punto de inflexión fue “Midas”. Eso era lo que queríamos hacer desde el principio, pero no teníamos las herramientas. Había que coger valentía y aprender mucho para llegar a lo que estamos haciendo ahora”.


“Midas” cogió forma con la ayuda de Fer Peleteiro (del grupo Verto) y el productor Iago Pico, que decidió quedarse en el proyecto. Elemento clave para el sonido de otros artistas de nueva hornada en Galicia, Pico es ese melenudo al que hemos visto, a pecho descubierto y bañado en aceite, aporreando la percusión tras las chicas en el Benidorm Fest. Las dos actuaciones de Tanxugueiras cantando “Terra” en TVE sobrepasan con holgura los 8 millones de reproducciones en YouTube. Su lyric video, que no contiene imágenes, suma otros 5 millones. El grupo ronda los 600.000 oyentes mensuales en Spotify. El resto de métricas son igualmente apabullantes.

“Cuando te liberas del miedo y del prejuicio, sobrepasas los límites de tu estilo y entonces aparece lo guay. Por ejemplo, somos súper fans de Baiuca. Y de Rodrigo Cuevas”, dice Aida. “La música tradicional de tu zona es lo único que va a acompañarte toda la vida. Pero, hace muchos años, cuando llegó la radio, las señoras empezaron a cantar con los dejes que escuchaban: las habaneras, las coplas… Del mismo modo, nosotras tenemos influencias a través de Spotify y de la tele. Por eso nos sale la sonoridad de la época en la que vivimos”.


Continúa Olaia: “No estamos yendo contra nuestra cultura, sino todo lo contrario. “Terra” demuestra que con el atrevimiento ganamos todos. Y romper barreras no es bueno solamente para un grupo o artista, sino para toda una comunidad”.

Las mil influencias de Tanxugueiras: de Mercedes Peón a Nathy Peluso

Las Tanxu tienen conciencia de tierra y de mujer. Como su paisana y antecesora Mercedes Peón, a quien tanto admiran: “Es una visionaria; sus temas de hace diez o doce años suenan actuales hoy y dentro de veinte años”. También es importante el influjo de Guadi Galego, su precursora y amiga: “Su sonoridad me hace feliz”, dice Olaia. Pero la lista de debilidades de Tanxugueiras, con Rosalía a la cabeza, tiene un poco de todo: María José Llergo, Belén Aguilera, Xabier Díaz, Nathy Peluso… Aida vive en un bucle escuchando a la afroportuguesa Pongo, diva del neokuduro a la que descubrieron en el Womex 2021. En los últimos meses, las Tanxu han grabado colaboraciones con Rayden (“Averno”) o Muerdo (“Cambia todo”), entre otros artistas.


Busca la playlist de Aida, Olaia y Sabela al final de esta página

El nuevo disco

En tiempos de globalización, virtualidad y metaverso, Tanxugueiras apela a la raíz. “Las culturas del mundo están unidas por hilos invisibles”, afirma Olaia. “Por eso, propuestas como la nuestra han encontrado cariño en lugares muy distintos. Dices, ¡guau, me mola esto!, pero porque también hay tierra, hay emoción. Ahora queremos cuidar a nuestro público aquí, pero luego vamos a viajar más y nutrirnos de las músicas del mundo”. Y retoma Tarrío: “Sería interesante cruzar a Estados Unidos. Allí demasiada gente piensa que España es toros, flamenco y paella, pero nada más. Habrá un punto de inflexión el día que Baiuca, Rodrigo Cuevas, nosotras o quien venga detrás consiga que la gente vea que aquí hay más culturas”.


Tanxugueiras publicará su tercer disco “antes del verano”. La campaña eurovisiva (y las muchas ofertas y compromisos surgidos desde entonces) ha retrasado el lanzamiento, pero el nuevo material está grabado y empaquetándose. Aida ofrece algunas pistas: “Con el nuevo disco, la gente va a encontrar todo el sentido a “Midas” o a “Figa”. Nos gusta llegar a una generación joven con un sonido contemporáneo, pero lo bonito es que se estampen con la tradición y quieran investigar por ahí también”. Todo obedece a una reflexión y el concepto es el concepto: “La música tradicional pura seguirá teniendo su hueco, tanto en el disco como en los conciertos. A quien no le guste, va a tener que tragar”, bromean.

Tanxugueiras para CULTURA REVISTA SGAE

12 favoritas de Aida, Olaia y Sabela


Quizá no son las canciones preferidas del trío gallego. Tampoco las que más han influenciado su estilo. Aquí tienes, simplemente, una docena de temazos que Tanxugueiras no pueden dejar de escuchar en la primavera de 2022.

Fotografía

Rocío Cibes

Enlaces

Tanxugueiras

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CREADORES POR UCRANIA

La Confederación Internacional de Sociedades de Autores y Compositores (CISAC), a la que está adherida la SGAE, integra a 228 sociedades en 120 países. Es la red más extensa de cuantas afectan al sector creativo internacional y quiere manifestar su repulsa a la acción militar rusa en Ucrania y su abrazo a los autores y autoras de este país europeo, ahora devastado por la guerra. Por eso, CISAC ha puesto en marcha su campaña Creators for Ukraine (Creadores por Ucrania), que coordina una recogida de firmas y un fondo económico de solidaridad, entre otras iniciativas.


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