ESCENARIOS
TEATRO PRINCIPAL DE MAÓ
La fortaleza de activismo cultural que acogerá los XXV Premios Max
POR MARTIN CALVO
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El 15 de febrero de 1829, casi mil almas entraban en el recién inaugurado Teatro Principal de Maó, cuyo patio de herradura se convertía en el único y más amplio del mundo construido sobre un baluarte militar. Sus 16 arcos operaban como base de tres palcos (más el obligado gallinero) erigidos por los maestros Alfons Hernández y Josep y Pere Pons bajo la dirección del arquitecto italiano Giovanni Palagi, pero decorados por el artista ciudadaleno Andreu Galbis.
Allí, en 1894, vio la luz en sentido literal una de las primeras instalaciones eléctricas de las islas y del reino. Fue de la mano de otro ilustre menorquín, Francesc Andreu Femenías, apicultor enredado en enchufes y viajes por el mundo. Y así, en este escenario fueron petándolo los tiktokers de cada época, desde Antonio Machín a Josep Carreras, pasando por Giacomo Aragall o Joan Pons. Durante buena parte del siglo XX fue, además, el único cine de la isla. A menudo, las grandes producciones operísticas o teatrales coincidían con los estrenos que llegaban del mismísimo Hollywood, así como con las últimas cintas de los Buñuel, Berlanga, Bardem, Fernán-Gómez, Saura, Olea, Erice, Borau… Un maravilloso totum revolutum de ópera, teatro, danza y cine en jubiloso desorden.
Curiosamente, este es uno de los teatros de España que más telones de boca ha tenido. El tercero y último fue elaborado en 1860 por el pintor y escenógrafo menorquín Francesc Pons y Alzina, con motivo de la visita de la reina Isabel II a la isla. La cita a punto estuvo de causarle un buen coscorrón a la libertina monarca, cuyo carruaje se las vio y deseó con el hielo impregnado en el adoquín.
A lo largo de los años, el Teatro Principal de Maó ha vivido numerosos cambios físicos. Pero fue la última rehabilitación (de 1997 a 2001) la que devolvió su esplendor a la antigua platea ochocentista, incorporando nuevas tecnologías e instalaciones para poder afrontar los montajes más vanguardistas y exigentes. Aun habiéndose rehecho el perímetro de todo el conjunto, la sala y fachada principales conservan sus características originales.
Programación de alta gama
En 2014, el Ministerio de Cultura otorgó al Teatro Principal de Maó la Medalla de Oro al Mérito en las Bellas Artes en su condición de primer coliseo de ópera del país, y recientemente ha sido incluido en la ruta europea de teatros históricos promovida, claro, por la Asociación de Teatros Históricos en Europa.
Todo esto repercute en su actividad. La programación ha de estar a la altura del continente y, sin duda, el reto de sus programadores debe de ser equivalente a afrontar con dignidad el bajón de un domingo por la tarde. Según estos, “en los últimos años han pisado estas tablas grandes artistas y compañías, nacionales e internacionales, de múltiples disciplinas”. Citando solo algunos: La Fura dels Baus, T de Teatre, La Cubana, Dagoll Dagom, Centro Dramático Nacional…
Han iluminado este recinto figuras de la escena como Emilio Gutiérrez Caba, Juan Echanove, María Galiana, Natalia Sánchez, Marc Clotet, Concha Velasco, Lluís Homar, Verónica Forqué, Joan Pera, Emma Vilarasau, Jordi Bosch, María Luisa Merlo, Gemma Cuervo o José Sacristán. Lo han pateado Víctor Ullate, Antonio Canales o Igor Yebra. Le han cantado Amaral, Jorge Drexler, Silvia Pérez Cruz, Joan Manel Serrat, Rosario Flores, Luz Casal o Ainhoa Arteta… El Teatro Principal de Maó es eclecticismo artístico y cultural al servicio de una audiencia exigente pero agradecida.
Como guinda del pastel están los Premios Max, que se celebrarán en este teatro el 6 de junio. Tienes la info un poco más abajo.
Fotografía
Teatro Principal de Maó
Audio
Narración: Martin Calvo
Producción: Irkus Uranga
Músicas: “Zascandil”, de Joshua Edelman (Jazz Basque Country Productions); “No trobaràs la mar”, de Maria del Mar Bonet amb Borja Penalba (Blau-Discmedi)
Enlaces
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XXV PREMIOS MAX, 6 DE JUNIO
El Teatro Principal de Maó se prepara para acoger la ceremonia de entrega de los XXV Premios Max de las Artes Escénicas, que organiza la Fundación SGAE con la colaboración, entre otros, del Ayuntamiento de Maó y el INAEM. La gala será la noche del 6 de junio y estará dirigida por dos grandes referencias baleares: Josep Pere-Peyró (actor, autor y director teatral, fundador de las compañías Morel Teatro, Cía Pere Peyró y la Invenció) y Mar Aguiló (bailarina de amplio recorrido internacional y coreógrafa de la Compañía Nacional de Danza).
Los Premios Max de las Artes Escénicas fueron creados en 1998 por la Sociedad General de Autores y Editores para reconocer la labor de los profesionales y la calidad de las producciones más destacadas del año en el ámbito escénico. El carácter itinerante y la elección de espacios emblemáticos distinguen la gala de los Max. Cada año, estos premios viajan con su espectacular equipaje festivo de una Comunidad Autónoma a otra, como metáfora de las giras de las compañías de teatro y danza.